LA_MENTE_DE_LAS_CELULAS

Monet, Claude_Nenúfares, 1905

...Bajo su cuádruple trama, el cuerpo no vive absolutamente para nada el mundo tal y como es. Ese mundo "tal y como es" es, precisamente, el gran misterio de la Evolución; nosotros lo conocemos y las demás especies lo conocen sólo a través de una cierta visión que ha ido variando, binocular o compuesta, dentro de una determinada gama de frecuencias vibratorias, y por mediación de ciertos mecanismos funcionales -pinzas, aletas natatorias, cilios vibrátiles o microscopios electrónicos- que no describen verdaderamente el medio, sino sucesivas maneras de ser y de percibir un misterioso algo del que sólo conocemos una traducción en idioma de batracio, en latín o en lenguaje electrónico.

Un algo visto siempre "a través de".

La única diferencia entre el hombre y las demás especies es que éste añade a todo una arrogancia greco-latina, y que sus aletas natatorias particulares, cerebrales, han invadido todo el sistema y han obstruido todos los demás medios de comunicación, de tal forma que ya ni siquiera sabe lo que sabe el pez, lo que sabe el pájaro y lo que saben todos los demás animalillos del buen dios, que, ciertamente, a pesar de su ignorancia de las matemáticas superiores, viven en perfecta armonía con su medio.

Este misterioso "algo" en el que nos bañamos se revela poco a poco al explorador del descenso al cuerpo como una especie de maravilla un tanto asombrosa en la que todas las leyes y los códigos y los encadenamientos demuestran ser solamente las leyes y los códigos y los ..., de nuestros propios instrumentos de medida o de percepción...

Satprem